EL OTRO - NICOLLE - DISCORD - 16.30hs

 

Foto tomada por Erika Cots


    Con Nicolle no nos conocíamos, el grupo de trabajo se formó al azar por el grupo de whatsapp de la comisión. En la realización del primer trabajo grupal tampoco llegamos a conocernos, todas nuestras charlas eran puramente del trabajo. Algo característico de la virtualidad también, la lejanía con el otro y la imposibilidad de llegar a conocerlo. La charla previa al retrato me recordó lo mucho que me gusta la presencialidad en FADU, la interacción con mis compañeros. Me recordó las charlas en el colectivo, durante las clases y las filas en el comedor y las imprentas. Todos esos momentos que hacían posible la formación del vínculo con los compañeros que resultan en amistades una vez que los temas de conversación dejan de girar exclusivamente en torno a la cursada. 
    En nuestra charla aprendí de Nicolle, de su familia, de su país y como cambió su vida al mudarse. Hablamos de nuestras rutinas diarias, de nuestros intereses, mascotas de la infancia y de las historias atrás de sus tatuajes. Nos reímos contando historias de la vida y nos indignamos de los prejuicios de la sociedad. A partir de las horas de charla, puedo describirla como más que una simple compañera. Sé de su gato, sus intereses artísticos, de lo mucho que le gusta tocar la guitarra y que quiere aprender a tocar la batería. 
    Con todo lo que aprendí sobre ella y con los recursos mínimos con los que contábamos, comenzamos con el proceso del retrato. Decidí aprovechar la luz natural que abunda en su habitación. De alguna forma representa su simpleza y tranquilidad. Uno de los momentos más divertidos y que recuerdo es contarle de mis anécdotas de la infancia, de los peces de mi abuela. Nos reímos mucho e incluso ella ya se imaginaba que podía ser una buena historia para animar. En toda la charla predominaron nuestras sonrisas, y por esto la quise representar así. Con una expresión tierna, ojos suaves y una sonrisa en la cara. Muy característico de ella, una persona con la que es muy fácil abrirte y hablar de todo. 
   
    En cuanto a los aspectos más técnicos, luego de recorrer su habitación, decidí esa posición en parte por la luz y en parte por su comodidad. Le indiqué el tamaño de plano que buscaba y la altura de la cámara y así llegó a esa posición de su computadora. Con la luz natural de la ventana de un lado, le pedí que ubique algún rebote para rellenar las sombras más oscuras que se formaban del otro lado. Cosa que resolvió con el reverso de un poster sobre una mochila. 


Experiencia Nicolle


    Ser retratada, en general, fue una experiencia muy nueva para mí. No estoy acostumbrada a posar para fotografías ni mirar a la cámara directamente. Realmente fue útil empezar la llamada con un diálogo abierto y bromear. Siento que la locación y disponibilidad de espacio de mi parte también fue limitado, sin embargo esto se resolvió bastante bien. Se aprovechó luz natural y que mi habitación da hacia la calle. Lo más curioso es el vínculo que se forma con el que retrata: mi compañera es una persona que conozco apenas pero con quien me abrí -virtualmente- y con quien me dejé capturar a pesar de todo.



Backstage y planta de luces







Comentarios

Entradas populares